jueves, 1 de junio de 2017

ARTÍCULO FINAL



Que rápido se ha pasado el curso hace nada estaba de prácticas y ahora ya estoy a punto de empezar las vacaciones. Realmente ha sido un año muy duro y de mucho trabajo, pero la verdad que he aprendido cosas nuevas que me han aportado mucho para mi futuro. Concretamente en esta asignatura de Didáctica de la lengua española, podría decir que ha dado un vuelco de 360º mi concepto del área de lengua, con todos sus aspectos. Claramente yo siempre he sido receptora de lo que me enseñaban mis profesores sobre la lengua, y yo consideraba que la forma en la que me lo enseñaban, junto con sus dinámicas, eran las únicas y las mejores. Después de estos meses me he llegado a replantear muchas cosas; ¿hay más formas de enseñar la ortografía y el vocabulario?, ¿los dictados hay que prepararlos?, ¿se expresarme correctamente?, tener buena letra significa ¿qué sea bonita y como la de la profesora?…

La lengua es la base de cualquier conocimiento, y es una actividad meramente humana, que supone una complejidad, que en ocasiones no valoramos. De esto mismo fuimos consciente en los primeros días de clase donde hicimos una actividad, en la cual una persona nos indicaba la composición de un dibujo que él tenía, y nosotros teníamos que hacerlo igual. Esta actividad la realizamos en dos partes, en primer lugar, la persona que indicaba no podía recibir preguntas por parte nuestra sobre ciertas aclaraciones, en cambio en la segunda parte sí. Aquí notamos una gran diferencia, el hecho de poder establecer ese intercambio comunicativo, nos ayudo a entender las explicaciones que nos daban, y para que la persona que las daba comprendiese si realmente le entendíamos sus guías o no.
Si nos paramos a pensar cuantas veces al día empleamos la lengua en sus diversas formas, escrita o no escrita; visual, táctil o auditiva; verbal o no verbal,… se nos hace imposible concebir un mundo donde no exista el lenguaje. ¿Se entiende ahora cuando recalcamos la importancia del buen trabajo de la lengua en la escuela?

De esta manera es importante la labor del educador en enriquecer tanto la lengua oral de los alumnos como en enseñarles la correcta utilización de la lengua escrita. Es primordial que los niños comprendan que gracias a la lengua podrán ser capaces de favorecer su expresión lingüística, donde poder expresar sus sentimientos, ideas, vivencias y opiniones, de la manera más adecuada, y consiguiendo que todos comprendan que quiere trasmitir. Además, nosotros tenemos la importante tarea de crear ambientes donde se favorezca  y se propicie el desarrollo de la comunicación, sin limitarnos únicamente a ejercicios del libro.

A lo largo de esta asignatura he podido aprender muchas cosas y aclararme otras tantas que tenía muy confusas. Podríamos decir que con el trabajo diario de las entradas y la elaboración de las diferentes actividades, destinadas a una parte de la lengua, he podido aclarar y comprender de la mejor forma estos aspectos, y es que no hay mejor enseñanza y aprendizaje de un cualquier conocimiento o capacidad, que no sean poniéndolo en practica y en contexto. ¿No aprendemos a conducir conduciendo? Pues enseñemos la lengua hablando o escribiendo de manera contextualizada, desarrollemos su pragmática desde lo lúdico. Aprender no es solo memorizar también es divertirse, algo lúdico.

En el primer bloque que iba dirigido al tema del lenguaje, la lengua y la comunicación oral, he podido reflexionar acerca de aquellos aspectos, que a veces pasamos por alto, pero son determinantes para el trabajo de la comunicación y la expresión oral. En primer lugar, debemos crear un clima motivacional, aunque hablemos aquí del tipo de ambiente, es un punto importante que debe primar en cualquier actividad indiferentemente del área. El niño debe sentir que todos los factores que le rodean le presentan cierta seguridad y bienestar, además de hacerle sentir cómodo para poder desarrollarse en todas sus capacidades. Si no creamos un espacio donde el niño se sienta con la necesidad de expresar sus vivencias o sentimientos, como pretendemos que el niño desarrolle su capacidad comunicativa.

Dentro de la creación de este clima, encontramos otro punto a tener en cuenta, y es la programación de situaciones y técnicas de comunicación oral, es decir, abarcando el trabajo desde la forma más individual y plural, debemos establecer situaciones distintas y siempre contextualizadas para que el niño tenga ganas de expresar a los demás sus ideas acerca del tema. En este aspecto es importante que no nos limitemos a actividades, dinámicas, ni a temas estándar, sino que debemos estar en continua actualización, teniendo SIEMPRE presente los intereses y opiniones de nuestros alumnos. Esto es algo que nos pasa a todos, independientemente de la edad, si estamos en un grupo cuyo tema de conversación es algo que estamos interesados y conocemos, querremos dar nuestra opinión acerca del tema, en cambio si nos es indiferente o desconocemos de que hablan, nos convertiremos en meros sujetos pasivos que se limitan a escuchar u oír. Haciendo aquí una puntualización, no es lo mismo escuchar que oír, y esto es algo que muchos no tenemos muy claro, oír es captar los sonidos que nos rodean, en cambio escuchar es prestar atención a lo que oímos. Este aspecto debemos dejarlo muy claro a nuestros alumnos.

En tercer lugar, debemos dar a conocer nuestros intereses y finalidades de la actividad a los niños. Pero para ello, debemos conocer primeramente que conocimientos previos tienen acerca del tema, comprender que ideas y que relaciones tienen establecida, de esta manera les podremos guiar para el desarrollo de ciertas competencias metalingüísticas, estimular su pensamiento,…

En cuarto lugar, una vez terminada la actividad no debemos poner un punto y final, sino que debemos establecer técnicas de compresión. Esto no quiere decir que les hagamos una evaluación sobre si han hablado mucho o poco, si sabían mucho del tema o no, sino que hace referencia a comprender las diferentes opiniones sobre la dinámica y el tema tratado, que ellos se sienta participes de lo que han realizado, de forma individual o grupal, comprendan sus errores o equivocaciones en cuanto a ideas equivocadas, relacionen sus ideas previas con las nuevas aportaciones,…

Por último, pero no menos importante, debemos establecer unas normas de convivencia y actuación previamente a la realización y puesta en práctica de la actividad de esta manera nos se provocaran ciertos problemas que dificultes la dinamiza.

Podríamos establecer de manera más resumida la importancia de que el educador deba tener en consideración para las actividades destinadas a la compresión y expresión oral:

  • No descalificar la acción de hablar ante los alumnos. 
  • No interrumpir las comunicaciones espontaneas de los alumnos
  • Interesarse y aprender de las experiencias espontaneas reales de los alumnos
  • Construir un ambiente que favorezca la conversación
  • Apoyarse en los diferentes recursos de la oralidad
  • Enriquecer el vocabulario de los alumnos
  • Estimularlos a tomar la palabra
  • Estimular su manejo flexible de otros tipos de organización del discurso
  • Crear situaciones que requieran efectuar entrevistas
  • Estimular el pensamiento divergente y creativo
  • Apoyar a los alumnos a desarrollar ciertas competencias metacognitivas.

Teniendo en cuenta todos estos aspectos, para esta entrada elabore un tipo de actividad para el desarrollo de esta competencia, además debía tener en cuenta, como es normal, que me encontraría con un alumnos muy participativo y que impone su opinión a la de los demás, y por otra parte, a otro alumno que es más tímido y le cuesta participar en actividades grupales. Lo primero que pensé cuando me plantearon la actividad, es poner al niño hablar como mediador, para controlar sus intervenciones y establecer como pauta o norma el intervenir mínimamente tantas veces, y así lograr la participación del más tímido. Esta idea es muy habitual encontrarla en muchas aulas, pero no por ello se puede decir que es la mejor ni la más correcta de las soluciones. Lo que debemos hacer, para favorecer la expresión oral de los niños mañanas tímidos, es hacerles preguntas que sepamos que saben contestar o establecer un tema o un ambiente en el que se sienta cómodo. En cambio para el niño más inquieto, debemos dejarle muy claro las normas de convivencia, y establecer algún tipo de sanción elegida por el grupo de clase, no con la intención de estar dirigido únicamente a él, sino a todos.  

Otro aspecto que tuve que tener en cuenta a la hora de realizar esta actividad es la diferencia entre dialogo y debate, y los diferentes tipos de debates, estableciendo el más adecuado para primaria. Muchas veces podemos considerar que cuando debatimos dialogamos y viceversa, tratándolos como sinónimos, pero realmente no es así. En un debate suelen existir dos posturas donde cada una aporta sus argumentos, sus razones de su postura, que luego es comentada y discutida por los demás. En cambio en el diálogo se van exponiendo ideas, pero a diferencia del debate, no se pasa de una idea otra sin antes haber sido comentada, debatida y completada por los demás, de esta forma todos ponen un poco de cada uno, completando aspectos que otros no han tenido en cuenta o no sabían.

Una puntualización de los debates en Primaria es que deben de ser para empatizar, es decir, no debemos establecer dinámicas donde se divida la clase en dos posturas, a favor o en contra. Lo que se pretende con los debates en esta etapa, es que los niños comprendan, porque unos prefieren o defienden cosas diferentes a las que opinan ellos mismos, que entiendan las diferentes opiniones y las respeten.


Comprendiendo estos aspectos, entre otros tantos que fuimos trabajando, y tras la realización de la actividad, pasamos al segundo bloque donde comenzamos a trabajar la comunicación escrita, concretamente con la lectura. La lectura es un tema que para mi opinión, muchos maestros no tienen la idea o el objetivo del mismo, algo que hace unos meses yo tampoco tenía. Cuando hablamos de lectura en el aula, lo que nos viene a la cabeza es leer para luego responder unas preguntas acerca del texto, pero esta es la finalidad más errónea. Lo que se pretende con la lectura compresiva en el aula, no es que el niño memorice lo leído, sino que a partir de las ideas del texto sea capaz de expresar, por medio de su pensamiento y opinión, que conclusiones saca al respecto. 

Este tema me ha aportado mucha base teórica que desconocía, como es el hecho de que cuando somos lectores más hábiles, por medio de la ruta visual, realizamos fijaciones. Es decir, que realmente cuando leemos no leemos cada una de las palabras, sino que hacemos fijaciones en una parte del texto que nos abarca una idea general del mismo. Cuando conocemos ciertas estructuras o palabras no necesitamos realizar el proceso de descodificación, en cambio aquellas palabras desconocida o que nos provocan ciertos problemas de lectura, necesitamos establecer dicha descodificación por medio de la ruta fonológica.

Es a partir de aquí cuando nos damos cuenta que la labor de los educadores en primaria, es desarrollar la agudeza y la habilidad visual y de atención, logrando un desarrollo de las fijaciones. En primaria no es tanto enseñarles a leer, como se hace en infantil, sino que se centran en el desarrollo de ciertas habilidades.

Aunque durante este bloque he conocido y he aprendido los diferentes métodos de lectura, las partes más teóricas y técnicas, lo que más destaca del tema y lo que más me ha servido y me servirá para mi futuro, es el tratamiento de cómo enseñar a leer correctamente, tanto de forma oral como silenciosa, en la etapa de primaria.

Es importante que cuando se les enseña a leer a los niños, no tratemos de enseñarles por medio de la descodificación de silabas o letras, sino que trabajemos la lectura desde la forma más global, para ir luego a lo largo de la etapa, incidiendo en cada una de las partes. Debemos enseñarles las diferentes palabras con sus respectivos significados y significantes, siempre de la forma más contextualizada, ya que es de la manera en la que su aprendizaje será más significativo, además de que le permitirá establecer relaciones.

La lectura oral, es un aspecto que realmente no está bien enfocado en las aulas, de esta manera, a lo largo del bloque, he podido comprender realmente su finalidad. Estamos acostumbrados a vernos en aulas, donde entienden la lectura oral como una actividad donde un niño lee en voz alta un texto, que no se ha preparado previamente, mientras sus compañeros siguen la lectura, he aquí el error que todos comenten. La lectura en voz alta es una actividad compleja y como cualquier tipo de actividad necesita ser trabajada como se merece.

Cuando hacemos un tipo de actividad donde el niño para a trabajar la lectura oral, debemos presentarle primeramente al niño el texto que va a leer para que durante unos días se lo prepara en casa o en el aula. Con este trabajo previo, conseguimos que el niño se sienta más cómodo y seguro a la hora de leerlo delante de sus compañeros, además de que conseguiremos que se reduzcan los posibles errores de vocalización o mala pronunciación. Con este trabajo previo, tratamos también que el niño haga una compresión de las diferentes palabras y estructuras, para que entienda la idea del texto y lo que le quiere trasmitir, es el momento de que el niño pregunte palabras desconocidas o el sentido de ciertas frases. Tras esta previa preparación, donde también trabajara el volumen, el ritmo, la postura, las pausas,… llega el momento de leer el texto en el aula. En este momento todos los niños deberán tener el libro cerrado, si es que el texto lo tienen ellos, y prestar atención a la lectura de su compañero, tratando de comprender la idea que les trasmite. Tras esta lectura, dejaríamos un rato de dialogo para posibles preguntas o dudas al respecto. Terminado este rato de dialogo, pasaríamos a una segunda lectura, la lectura silenciosa.

La lectura silenciosa es un trabajo más individual, en el cual los niños trataran de comprender la idea del texto y el significado de las diferentes estructuras gramaticales. Es importante que durante este tipo de lectura recalquemos, antes de empezar, que cuando un niño termine espere a los demás de forma adecuada, sin formas escándalo, de esta manera cada niño podrá seguir el ritmo que necesite. Es en esta actividad cuando nosotros deberemos prestar atención a aspectos como si vocaliza, su ritmo de lectura  o la postura que tiene. 

Para poner en práctica lo aprendido en este bloque y asentar estos aspectos primordiales, establecimos una posible práctica para aula. Donde no solo seleccione un texto adecuado a la edad elegida, sino establecí las indicaciones previas y posteriores a la lectura, junto a las respectivas actividades visuales, de compresión de memoria, atención,… realmente fue una actividad que me ayudo mucho a asentar dichos conceptos, y a ampliar mi repertorio de actividades para el desarrollo de estas destrezas.


Entrando en el tercer bloque del temario y siguiendo por la línea de la comunicación escrita, ahora entramos en el tema de la escritura, y con el fin de conseguir dos objetivos:


  • Entender la importancia de aprender a escribir como medio de expresión en diversas situaciones, para luego hacérselo ver a los niños.
  • Conocer diversas formas en las que podamos ofrecer esas situaciones para que el niño use la lengua escrita.
  • Con el trabajo de este tema pude comprender ciertos términos, que en mi vida cotidiana, empleaba de manera incorrecta o no sabía la definición exacta. Esto fue el caso de escribir, la cual yo definía como la forma de representar mediante símbolos el lenguaje; caligrafía distintos tipos de representar los símbolos de la escritura; o redactar, plasmar por escrito unas ideas de forma secuenciada y con coherencia. Ahora pienso en estas definiciones y me pongo las manos en la cabeza de pensar que perdida estaba antes de empezar.

La escritura puede recoger que la importancia reside en la adquisición de la forma de las letras o la trayectoria de la escritura, pero realmente estos son aspectos que tienen importancia en la etapa de Infantil más que en la de Primaria. En Primaria debemos centrarnos en el desarrollo de la caligrafía. Es verdad que nos encontramos en una etapa donde las tecnologías están ocupando gran parte de nuestras actividades diarias, desplazando otras más tradicionales. Pero esto no es razón para dar de lado a la escritura más manual y a su desarrollo. Nuestra tarea aquí, como futuros maestros, es motivar a los niños a querer escribir de la manera más legible y clara. Es en este momento, donde debo hacer una anotación, cuando decimos que queremos que nuestros alumnos mejores su letra no hacemos referencia a que sea más bonita, ya que la letra, al igual que nuestra forma de actuar, son parte de nuestra personalidad, y eso el algo que no debemos cambiar, pero si podemos mejorar, para que otros disfruten de lo que plasmamos por escrito.

Con el trabajo de la caligrafía debemos dar importancia, no solo a que la letra sea legible y clara, sino a la postura y hábitos que le niño toma a la hora de escribir; los movimientos gráficos y la presión que hace; y la velocidad y ritmo con el que escribe.

La mejor forma de trabajar y corregir a aquellos niños alguno de estos aspectos, es planteándole actividades que favorezcan su motivación y estén en relación con sus intereses. De esta manera, es mucho más favorable presentarle al niño el trabajo de elaboración de textos de carácter más social, como es la elaboración de un guion de película, un cartel publicitario, un periódico,… más que la redacción de la primavera. Nuevamente volvemos a dar importancia a aquellas actividades que tienen relación con aspectos de la vida cotidiana y con su respectiva contextualización. También podemos hacer uso de los recursos más grafomótrices, que además de resultar muy lúdicos a nivel general, suponen un gran trabajo y desarrollo del movimiento de la mano, favoreciendo la escritura.

Es importante, sobre todo para los niños más mayores, que vean y conozcan la finalidad de este tipo de ejercicios. De esta manera, la copia de letras o frases sin motivo alguno está bien para el primer ciclo, pero en los ciclos restantes, es necesario que busquemos actividades que tengan un segundo fin, como en la elaboración de un periódico de aula o una carta para una fiesta, donde los niños vean la necesidad de mejorar su letra para poder ser leída por los demás.

En este tipo de trabajos, que suponen un refuerzo para algunos niños, cobra un sentido muy importante el saber cómo explicarles a los niños la importancia de mejorar la legitibilidad y claridad de su letra, de esta manera no pondrán barreras o una actitud negativa hacia la realización de las diferentes actividades. Esto mismo lo pudimos poner en práctica en la elaboración de la actividad de este bloque, la cual me ha ayudo a plantear nuevas actividades para el trabajo de la caligrafía de una forma mucho más lógica de plantearla y lúdica. Además ha sido una oportunidad para conocer nuevas ideas de mis compañeros, que personalmente no se me pasaron por la cabeza y me parecieron muy originales.

En este tipo de actividades, me doy cuenta de las diferencias entre infantil y primaria, mientras que en infantil ellos realizan la actividad sin preguntarse el porqué y el para qué, en estas edades (primaria) se ve como van madurando y quieren saber los motivos de muchas cosas, quieren conocer la finalidad.



En el cuarto bloque nos centramos en el trabajo de la semántica y la ortografía. Considero que estos dos aspectos son claves en relación a la diferencia entre Infantil y Primaria, mientras que en Infantil se da más el trabajo de adquisición de vocabulario nuevo y saber escribir, en Primaria se trabaja más la adquisición y la interiorización  de la semántica y la ortografía. En muy frecuente que en esta etapa encontremos niños que tendrán muchos problemas en relación a estos aspectos, ya que es un trabajo más complejo que requiere nuestra atención, y por ello, debemos de trabajar en el aula estos aspectos de la forma más lúdica y sobre todo contextualizada.

Este tema me ha abierto los ojos a ciertos aspectos que consideraba prácticas correctas, que no buenas, y realmente es todo lo contrario. Primeramente quiero destacar, lo importarte que es  que el niño tenga un contacto con los textos escritos, los lea y pueda escribir las palabras correctamente, antes de poder pasar al trabajo ortográfico. Debemos saber que para trabajar la ortografía debemos trabajar sobre todo la atención, la memoria visual y el uso funcional de la escritura, de esta manera debemos trabajar previamente actividades orientadas a estos aspectos, facilitando la futura adquisición de la ortografía.

Es muy frecuente encontrar en los centros, la penalización de la mala ortografía como una buena práctica, algo que es erróneo, además de provocar cierta desmotivación al niño por mejorar. Lo que se debería hacer es a partir de esos errores, emplearlos como recurso para aprender y mejorar. De esta forma el hecho de corregir las faltas ortográficas y dejarlo estar, no sirve de nada, lo que si puede ayudarnos es la interiorización que podemos hacer posteriormente con ciertas actividades. También deberíamos olvidarnos de que la lectura silenciosa ideovisual es un buen recurso para fomentar la buena ortografía, ya que esto es erróneo, como veíamos en temas anteriores, cuando leemos hacemos fijaciones, es decir, no vemos todas las letras. En cambio, la lectura atenta o el voz alta si son buenas prácticas.

Dentro de la ortografía quiero destacar la importancia de saber que el uso de los dictados no es una buena actividad ni debe servir como sistema de evaluación del mismo, por lo menos la idea que tenemos muchos de lo que es un dictado. Realmente este tipo de dinámicas deben estar orientadas a recibir una previa preparación por el niño. Al igual que planteábamos en la lectura en voz alta, debemos darle al niño el texto o rases que vamos a dictar para que se las prepara previamente, una vez trabajadas y comprendiendo su ortografía, ya si podemos emplearlo como medio de evaluación. Sin esta preparación previa, sería un error nuestro presentarlo como forma de evaluación.

En relación a la semántica, quiero destacar la importancia que es el trabajo por medio de situaciones concretas y contextualizadas. De nada nos sirve que el niño comprenda la palabra en su totalidad y usos, si le damos el diccionario tal cual para que se lo aprenda. Con este tipo de trabajo debemos hacerle ver al niño que las palabras tienen un sentido según como y donde las utilicen. Como vemos bloque tras bloque, los niños tienen que ver la función del lenguaje, el para que me sirve o para que puede utilizarlo, si ven el fin querrán saber cómo emplearlo para beneficiarse de él.

De este bloque quiero destacar la gran cantidad de actividades y recursos que puedo emplear en mi presente, cuando trabaje con los niños de forma más particular, como para mi futuro en mi aula. Realmente desconocía la gran cantidad de tipos de dictado que existen, y actividades orientadas a la ortografía y semántica, estas actividades tienen finalidades muy lúdicas, además de las academicas, que considero que son primordiales para el trabajo con los niños. Nuestros alumnos siempre van a interiorizar mejor aquellas cosas que han llevado a la práctica y les ha resultado divertido hacerlas, que el tipo de actividades de memorización teorica o de aspectos poco motivacionales.

Llegada la hora de poner en práctica alguna de estas técnicas/propuestas, estableci dos tipos de actividades, cada una en relación a estos dos aspectos tratados, de las cuales una me recordó a mi infancia, ya que la realice con mi profesora, cuando era pequeña, y la otra la pude llevar a la práctica con una niña a la que doy clase. Pudiendo comprar de primera mano ambas actividades puede ver su eficacia.

En este tipo de actividades, como en otras, es importante resaltar el posterior dialogo tras la actividad, donde los niños no solo comenten su valoraciones, sino también sus estrategias, para ayudar de alguna forma a sus compañeros que pueden necesitar alguna recomendación de actuación. También es importante que presentemos ejemplos antes de ponernos manos a la obra con la actividad, y conozcamos los conocimientos previos de los niños sobre la dinámica y el tema que vamos a trabajar. Lo que buscamos en estas actividades es que el niño sea el protagonista de su propio aprendizaje.



Tras este trabajo más detenido en el vocabulario y la ortografía, pasamos al último bloque, donde haremos una reflexión y estableceremos una serie de propuestas al sistema de la lengua, concretamente en la morfología y sintaxis. Conocer la gramática de la lengua, es decir, cada uno de los elementos, las reglas y las relaciones entre ambos del lenguaje, es una tarea que suele suponer cierta dificultad para los niños, en cuanto a su compresión. Por este motivo es fundamental que encontremos dinámicas o actividades que favorezcan la adquisición de estas nociones.

De este temario quiero destacar la importancia que le doy a la explicación de los diferentes tipos de componentes de la lengua desde su perspectiva morfológica y sintáctica, algo que nunca me había planteado organizar en mi mente e interiorizar las diferencias. Otro aspecto que me ha gustado conocer para mi futuro son los diferentes materiales aportados, aunque nuevamente lo que me ha servido y me servirá es la puesta en práctica y la búsqueda de recursos para este último bloque.

Es verdad que en repetidas ocasiones establecía la importancia de no ignorar ni dejar de lado las formas más características de los materiales tradicionales, como es el lápiz o el papel, sin dejarnos hipnotizar por la novedad de las tecnologías. Pero en esta actividad y teniendo en cuenta la importancia que tiene el estar actualizado y aprovechar los recursos que el medio nos ofrece, hicimos uso de las tecnologías, más concretamente internet, y buscamos diferentes paginas que fueran motivadoras, funcionales y que estableciesen un aprendizaje significativo. Realmente fue una actividad que me gusto mucho y me amplio mi marco de referencia, al estar acostumbrada a hacer actividades de este estilo por medio de ejercicios escritos de forma manual, me pareció una buena iniciativa, ya que no solo nos puede servir a nosotros para el aula, sino que los niños tienen la posibilidad de realizarla en casa.

Con esta actividad, además de descubrir por mi misma diferente página web, pude conocer otras muchas que mis compañeros me ofertaban en sus blogs y que me parecieron muy interesantes, al igual que funcionales y motivadoras.



Ha sido un curso junto a la asignatura donde quiero destacar la gran cantidad de aporte prácticos para el futuro, muchas veces nos dan mucha teoría pero nos faltan recursos y esto es algo que con esta asignatura no me ha pasado y es de agradecer. También me ha gustado y quiero resaltar que la multitud de recursos ofrecidos, como los elaborados por mí y mí puesta en práctica en cada entrada ha destacado, no solo la función de aprendizaje significativo, sino que también era primordial la motivación y lo lúdico. Creo que estos dos últimos aspectos, determinan un buen aprendizaje en los niños, ya que interiorizan mucho mejor aquellos aspectos que siempre han visto muy teóricos. Esta misma idea que expongo me la puedo aplicar a mí misma, realmente he aprendido mucho más con la elaboración de cada tema, que si llega a ser evaluado por medio de un examen donde me aprendería las cosas de memoria para después soltarla.

Creo que con toda esta reflexión queda plasmado de alguna manera lo que ha sido un gran año de trabajo y esfuerzo, y un gran recorrido con resultados puestos para un futuro donde la educación de un cambio a mejor, y que mejor que empezando en mi propia aula en unos años.