Ortografía y Semántica

¿Cuántas veces nos ha pasado que hemos escrito mal una palabra ortográficamente y el receptor de nuestro mensaje no ha sabido entender que decíamos?, ¿en cuantas ocasiones no comprendíamos lo que nos decían o leíamos por no conocer el significado de muchas estructuras gramaticales?

Qué la ortografía y la semántica son aspectos de gran importancia dentro del conocimiento de la Lengua, es algo que se conoce a la perfección, pero el error o el fallo de ambos aspectos es su trabajo e interiorización.

Primeramente debemos entender que la ortografía es el conjunto de normas que rigen la representación escrita, es decir, el código grafico de la lengua; y la semántica hace referencia al estudio del significado y la interpretación de los signos lingüísticos, abarcando tanto el significado de palabras (vocabulario), como el significado de frases hechas, expresiones habituales, figuras expresivas relativas al significado y construcciones diversas en un contexto determinado.(Lozano, 1983)

A partir de las propias definiciones de ambos términos y del conocimiento que tenemos sobre ellas, sabemos que su importancia es de gran relevancia, sobre todo dentro de un contexto. Con esto quiero decir, que una palabra este escrita bien o mal ortográficamente afectara al entendimiento de sus significado y dará un sentido u otro al contexto donde se encuentre. De esta manera, es muy importante que trabajemos con los niños el tema de la ortografía y ampliemos su abanico de palabras, frases,… de carácter semántico.

Con el trabajo de ambos aspectos conseguiremos que los niños lleguen a cursos más avanzados, y de cara a su vida futura, con una formación de las cuatro destrezas básicas (habla, escucha, lectura y escritura) excepcional.

La clave de todo esto está fundamentalmente en la forma en la que el maestro le integra al niño, mediante las distintas dinámicas, la ortografía y la semántica. Una mala dinámica, donde la motivación es nula, puede tener consecuencias futuras, como es el hecho de estar en el mundo laboral y comer errores gramaticales que “duelen a los ojos” o estar en una conversación sin poder seguirla por falta de compresión de las palabras que emplean el resto de personas.

Esta entrada me ha supuesto un reto para mí, al ser una persona que comete muchas faltas de ortografía, ya sea porque no me enseñaron como es debido o por qué no preste la atención que se requería en dicho momento. De esta manera, quiero tratar de elaborar actividades que motiven a mis futuros alumnos y adquieran dichas competencias de la mejor manera, para que no tengan problemas en su futuro.

En esta entrada muestro posibles actividades para realizar en primaria, en relación a la ortografía y a la semántica, incluyendo su preparación, su puesta en práctica y su posterior evaluación.

ORTOGRAFÍA

Para trabajar la interiorización de la ortografía voy a llevar a cabo la actividad de Abecedibujario, para el curso de 5º de primaria.

El trabajo de la ortografía suele ser lo más complicado con los niños, de ahí que en el momento de elegir una actividad para tratar este tema, tirase más por lo lúdico y creativo, evitando cualquier tipo de trabajo por fichas, que a mi parecer reduce la motivación de los niños. De esta forma, la actividad elegida se ajusta a los que buscaba. Además, otro de los motivos de mi elección es por el hecho de traerme recuerdos de mi infancia, ya que es una actividad que hice cuando estaba en el colegio y la verdad que tanto a mí como a mis compañeros nos ayudo mucho el hecho de escribir las palabras que tienen dificultad con un dibujo.

Para los que nunca han oído hablar de esta dinámica, la actividad de Abecedibujario consiste en que cada niño dibuje, en aquellas palabras donde se tiene mayor dificultad, un objeto de referencia en  la letra que plantea problemas.

Considero que es una actividad que se adapta a la edad escogida, ya que en esta edad suelen tener más dificultades en la memorización, y las actividades más visuales o las relaciones de conceptos con imágenes ayudan a que la interiorización de la información sea mucho más fácil, además de atrayente. Al estar en una edad en la que se empiezan a asentar más aun sus esquemas de información, el hecho de hacer relaciones de palabras con dibujos ayuda mucho en sus procesos de interiorización. (Abascal, n.d.)En relación a lo que establece el BOE vemos como para este curso refleja lo siguiente: “Utilizar con corrección las normas que regulan la ortografía en los textos escritos ajustando progresivamente su producción en situaciones reales de comunicación escrita a las convenciones establecidas” Visto la importancia que se le da que sepan emplear con mayor corrección las diferentes reglas, veo esencial que sepan escribir y diferenciar aquellas palabras que puede provocar dudas.(Real Decreto 2032/2009, de 30 de diciembre, 2010)

PREPARACIÓN

      Con esta actividad me planteo los siguientes objetivos:

1. Prácticas las reglas ortográficas trabajadas
2. Desarrollo de la creatividad del alumno en el trabajo autónomo.
3. Localizar y comprender los errores de ortografía y acentuación intentando mejorar en el futuro. 

 Los materiales que se necesitan, serán:

• Cartulinas o folios de un tamaño máximo de cuarto de folio.
• Lápices o rotuladores de colores.
• Libro en blanco

Esta actividad se planteara para realizarla individualmente, aunque tendrá una exposición y resultado final que será conjunta de toda la clase. Partiremos la actividad escogiendo aquellas palabras que suelen cometer más fallos los niños o de una forma más individualizada serán ellos quienes escogerán aquellas palabras que en otras actividades de clase han cometido fallos ortográficos. Una vez escogidas las palabras y habiendo realizado el dibujo en la letra correspondiente podremos exponerlas primeramente a la clase, para después ponerlas en un libro en blanco, donde siempre que se realice esta actividad o fuera de ella, como iniciativa propia, puedan los niños añadirla al libro de la ortografía. Esta segunda actividad que deriva de nuestra práctica principal, es un buen recurso para que se ayuden unos a otros a integran ciertas palabras escritas bien ortográficamente.

PUESTA EN PRÁCTICA

Como es habitual, partimos la actividad con una pequeña evaluación de conocimientos previos. Para ello, les iremos diciendo varias palabras donde han cometido algún fallo alguna vez, por lo que la maestra debe hacer una previa recopilación de ellas, y cada vez que recitemos una de las palabras, pediremos a algún niño (de forma voluntaria) que salga a la pizarra a escribirla como él considere que es correcto. Una vez escrita la palabra si está escrita incorrectamente le explicaremos donde está el fallo y lo corregiremos, pero si por el contrario está bien escrita le daremos la enhorabuena, así le motivaremos a continuar en la dinámica. Aunque es de forma voluntaria esta parte de la actividad, trataremos que participen todos para poder ver claramente que conocimientos tienen al respecto.

Es muy importante que antes de explicar nosotros la actividad y comenzar, preguntemos a los niños si conocen esta dinámica y si alguna vez la han realizado. En caso de que existan niños que si la hayan hecho alguna vez, les dejaremos que sean ellos quienes expliquen en qué consiste la actividad al resto de sus compañeros. Una vez que los niños hayan explicado la actividad, en caso de conocerla, o en el caso de desconocerla, seremos nosotros quienes les expliquemos de la forma más clara la actividad, para que ellos comprendan el fin de la misma.

Tras las explicaciones, aclaraciones y vista de los conocimientos previos, les mostraremos un par de ejemplos para que vean perfectamente que hay que hacer o como se puede hacer la actividad. 

Una vez que se comience con la actividad, dejaremos que los niños la realicen a su ritmo, mientras que nosotros adoptaremos una postura de ayuda, iremos por la clase viendo el trabajo que van haciendo, además de comprobar si necesitan nuestra colaboración ante alguna dificultad o para resolver alguna duda.

EVALUACIÓN

Esta actividad se podría decir que es de tipo objetiva, en cuanto a la forma de escribir las palabras que solo admiten una respuesta según su significado, pero también es de tipo abierta en cuanto que podemos encontrar diferentes dibujos para una misma palabra. De esta manera la parte más objetiva de la actividad la iremos corrigiendo de manera individual, para después, junto con la parte más abierta, ponerla en común tanto los diseños de las palabras como conocer las estrategias empleadas por cada uno. Con esta puesta en común, muchos niños podrán conocer diferentes opciones de representación y otro tipo de estrategias para futuras dinámicas.

Tras esta evaluación y conocer los métodos empleados, haremos otro tipo de preguntas donde nos interesa saber si les ha resultado fácil o difícil la actividad, tanto conocer las palabras en relación a su ortografía como buscar una representación para cada una de ellas, y por qué. También aprovecharemos para conocer si les ha gustado esta actividad, para repetirla de manera futura o no. Nos interesaremos por conocer si alguno sigue teniendo dificultades con alguna de las palabras, y si les ayuda esta técnica o no. Este tipo de cuestiones las haremos mediante un feedback en el aula y no como un cuestionario a rellenar.

Nosotros como maestros, tras ver como se ha desarrollado la dinámica, además de poner mucha atención en todas estas anotaciones que nos dan los niños, veremos  por un lado, si se han cumplido esos objetivos con los que comenzamos la actividad, y por otro, si debemos mejorar o cambiar ciertos aspectos de la dinámica

SEMÁNTICA

La actividad de interiorización de la semántica la voy a destinar para 1º de primaria, esta actividad es la de adivinar una palabra respondiendo solo si o no.

A la hora de escoger la actividad tenía muy claro que quería que fuese una dinámica muy lúdica, ya que de esta manera y, sobre todo a esta edad, actividades donde la motivación y su participación sean nulas provocan que el niño pierda el interés y no consiga cumplir los objetivos planteados.

Esta actividad está inspirada en el juego “¿Qué soy?”, en el cual cada persona tiene una carta, que el mismo no podrá ver, donde aparece la imagen o la palabra de un objeto, lugar, persona,… el resto de jugadores, que si ve las cartas de sus compañeros, responderán a las preguntas que le realice cada jugador acerca de su carta. Es importante anotar que las preguntas que se realicen solo pueden ser de tipo cerradas, es decir, solo admiten respuestas de “si” o “no”.

 

Esta actividad la podemos plantear en el aula de dos formas: por un lado, darles en las tarjetas la imagen junto a la palabra, facilitándoles así a sus compañeros la identificación de la palabra con su significado; y por otro lado, darles en las diferentes tarjetas únicamente la palabra. Al igual que disponemos de dos variaciones en relación a como realizar las tarjetas, en la selección de palabras encontramos dos variantes. La primera opción, es que el propio maestro de las tarjetas con las palabras seleccionadas a partir de su criterio. La segunda opción, establecer el maestro el criterio que queremos que tengan estas palabras y sean los propios niños quienes elijan que palabras van a utilizar.

La elección de esta edad se debe, en relación a su desarrollo evolutivo del lenguaje, a la falta de conocimiento de vocabulario y de establecer relaciones en cuanto a sus significados y su uso en un contexto. A estas edades, debido a estas carencias de semántica, los niños están abiertos a adquirir nuevas palabras, y a comenzar asentar y ampliar los esquemas que traen de Infantil sobre algunos términos o familias de palabras. (Rodríguez Ruiz, 2013) Además, podemos observar como en el BOE se refleja para este curso como uno de los contenidos: “La palabra. Reconocimiento de las distintas clases de palabras en los textos (nombre, verbo, adjetivo). Características y uso de cada clase de palabra. Género y número. Concordancia Vocabulario. Campos semánticos. Familias de palabras. Composición y derivación”. Por lo tanto considero que la actividad propuesta es muy apropiada.(Real Decreto 2032/2009, de 30 de diciembre, 2010)

PREPARACIÓN

Para esta actividad los objetivos específicos que me planteo son:

1. Incorporar y ampliar vocabulario relativo a ámbitos cercanos.
2. Diferenciar las palabras atendiendo a sus características.

El material necesario para esta actividad:

• Cartulinas para escribir las palabras o plasmar los dibujos correspondientes.
• Cinta para colocar la carta de la palabra, pudiendo ser la del juego mismo o de cartulina.
• Celo para poner la carta a la cinta, en el caso de ser la de cartulina

La actividad se plantea para realizarla en el aula de manera conjunta, con la anotación de que no todos tendrán carta con la palabra a la vez. Iremos eligiendo a los niños de dos en dos, o en el caso de tener poco tiempo para la actividad, los iremos seleccionando en grupos más grandes. Los niños seleccionados cogerán una carta al azar y sin verla se la pondremos en la cinta, mientras el resto de la clase estará atentos a las diferentes cartas y a las preguntas de sus compañeros. Una vez que alguno de los niños, de los que tiene la carta, adivine que palabra tiene se cambiara con alguno de sus compañeros, quien escogerá una carta nueva para participar.

La decisión de que no todos tengan carta a la misma vez se debe a la importancia de que todos puedan atender y conocer las diferentes palabras, con sus correspondientes características o clasificaciones. Por lo tanto, lo que se busca es un trabajo cooperativo.

PUESTA EN PRÁCTICA

Antes de comenzar la actividad en sí, les preguntaremos a los niños si conocen el juego “¿Qué soy?” y si saben jugar, de esta manera veremos los conocimientos previos que tienen. En el caso de que existan niños que tengan conocimiento del juego, les pediremos que traten de explicárselo a sus compañeros, además de ser una buena práctica para la expresión oral del niño, conoceremos si existen variaciones de juego entre ellos.

Una vez que tenemos claro si conocen o no el juego, o si hay variaciones entre lo que conocen unos niños u otros, realizaremos una explicación del juego lo más clara posible y de las normas o reglas del mismo.

El último paso antes de comenzar la actividad en sí, debemos realizar un par de ejemplos, para asentar mejor la dinámica de juego y para que los alumnos puedan comprender a la perfección el fin y normas de juego.

Durante la actividad, al ser de tipo oral, dejaremos a los niños que actúen por si solos, tratando nosotros de intervenir lo menos posible y escuchándoles a ellos, pudiendo únicamente adoptar el rol de mediador en los turnos de palabra.

EVALUACIÓN

Al ser una actividad abierta, al finalizarla con todos los niños les pediremos a algunos que nos cuenten que tipo de estrategias han empleado para adivinar su palabra. Podemos dejar que nos cuenten primero las estrategias utilizadas algún niño que quiera hacerlo de manera voluntaria, y después podremos preguntar nosotros a alguno de los niños que ha tardado menos y a otros que hayan tardado más en adivinar su palabra. Con esta dinámica muchos de los niños, sobre todo los que tardan más, podrán adoptar nuevas formas de realizar la actividad en futuras sesiones.

Además de hacerles preguntas sobre las estrategias, haremos otras interesándonos en si les ha resultado fácil o difícil, tanto hacer las preguntas a sus compañeros como adivinar las palabras que tenían, y por qué. También aprovecharemos para conocer si les ha gustado esta actividad, para repetirla de manera futura o no. Nos interesaremos por conocer si alguno ha aprendido palabras o características de las mismas nuevas, si han ampliado su vocabulario en la categoría tratada en esa sesión,…Este tipo de cuestiones las haremos mediante un feedback en el aula y no como un cuestionario a rellenar.

Nosotros como maestros, tras ver como se ha desarrollado la dinámica, además de poner mucha atención en todas estas anotaciones que nos dan los niños, veremos  por un lado, si se han cumplido esos objetivos con los que comenzamos la actividad, y por otro, si debemos mejorar o cambiar ciertos aspectos de la dinámica.

REFERENCIAS

Abascal, C. J. (n.d.). Psicológicas De Los Alumnos / As Del Segundo Ciclo De Educación.

Lozano, L. (1983). Didáctica de la lengua española y la literatura. Retrieved from http://millennium.itesm.mx/search~S63*spi?/Xlengua+literatura+ense{u00F1}anza&searchscope=63&SORT=D/Xlengua+literatura+ense{u00F1}anza&searchscope=63&SORT=D&search=Buscar&SUBKEY=lengua+literatura+ense�anza/101,147,147,B/frameset&FF=Xlengua+lite

Real Decreto 2032/2009, de 30 de diciembre,  por el que se establecen las unidades legales de medida. (2010). Boletín oficial del estado, 13.

Rodríguez Ruiz, C. (2013). El desarrollo del lenguaje en los niños y niñas. Retrieved May 11, 2017, from http://www.educapeques.com/escuela-de-padres/el-desarrollo-del-lenguaje.html